Katrin Coetzer
Tristeza
A papá me lo encontré
sentado solo en un banco,
con la cara entre las manos,
con la camisa sudada,
y le susurré despacio:
No te preocupes muchacho,
hay peores temporadas.
hay peores temporadas.
Legna Rodríguez Iglesias
Val Britton
Te hago novia de todas las
cosas:
de mi viejo Nova
de mi atascada Polaroid
de la flacidez del lápiz
de las estrellas porno
de la clausura del zíper
de los aviones que anidan
mi árbol de Prozac.
mi árbol de Prozac.
José Raúl Ubieta
Yani Clarke
Lilliana Ramos Collado
Mrzyk & Moriceau
made mostly of imagination
Katrin Coetzer
Legna Rodríguez Iglesias
Yani Clarke
poemas gulembos
olvidados en cajas de zapatos
yacen
bocabajo
poemas que dejé sin terminar
borradores meticulosos
con rima interna medio cursi
donde se hunde una que otra
verdad coyuntural sobre algo
cuya pertinencia
se ha ido borrando por la falta
de costumbre
me tropiezo
con estos bocetos descuidados
trato de recuperar su tiempo y
su lugar
algún pezón tierno entre mis
dientes
el ángulo de la luz en la
ventana
el tiesto roto cuya muerte
lamenté
o la olla que rescaté de la
avaricia
maldigo mi memoria por no haber
clasificado en sus sinapsis
estas
estampas polvorientas
maldigo el papel donde cuajaron
estos fracasos roídos de
erratas
mendigos en busca de sentido
que estiran su mano mustia
para agarrar un je ne sais quoi
no los publico porque los
encontré
ni porque merecen que otros
lean
este hoyo negro de tinta
derrochada
en cuya miseria se ahogan
las palabras
estos que lees hoy aquí no son
esos poemas encajonados que
decidí olvidar
éstos son peores
éstos sí que son
hijos de mi intención
hijos de mi intención
Lilliana Ramos Collado
Mrzyk & Moriceau
made mostly of imagination
“yo una vez dibujé un poema de un avestruz.”
“yo una vez enterré mi cabeza en la tierra.”
“yo una vez no quise salir a ningún lado.”
“yo una vez no tuve a dónde ir.”
“yo primero pregunto dónde, luego cuándo.”
“yo pregunto de qué, luego hasta.”
“¿nos veremos al regreso?”
“yo te espero.”
“primero habría que precisar el lugar.”
“primero tendría que procesar la falta que me haces.”
“yo quisiera llamarte precioso pero no a ti propiamente.”
“cuando se trata de ti, yo no tengo nombre propio.”
“lo siento, pero me atrasé en el camino.”
“yo me quedé atrás buscándote.”
“tenía un sombrero pero hundí mi cabeza en la tierra y se perdió.”
“el sombrero apareció en mi poema.”
“¿acaso te lo quitabas para saludar?”
“lo dibujé en mi mano para que no se me olvidara.”
“yo olvidé el camino de vuelta.”
“yo me aprendí un avestruz para ti.”
“no he podido sacar esa imagen de mi cabeza.”
Guillermo Rebollo-Gil
Katrin Coetzer
Metafísica
Veo veo.
¿Qué ves?
Una niña pecosa
caminando sin pies.
Veo veo.
¿Qué ves?
Otra niña pecosa
caminando sin pies.
Veo veo.
¿Qué ves?
¡Otra niña, Dios mío,
no podían ser tres!
no podían ser tres!
Val Britton
a Arturo Carrera
Me lanzó desde mi ceja
mientras con sobriedad mecánica
un violín autómata
interpreta el Adagio cúbico a la muerte
Alicia se fuga a través del
espejo
Carroll la busca bajo molesta
oscuridad
pero pierde el mágico artefacto
en medio del juego de ajedrez
que la penumbra convida
Yo también soy un niño
desvanecido
un niño sin Dios
que se desplaza por un río
carburante
a través de espeso bosque de
levas
navego en la barca de Caronte
no tengo dinero
me pide el nictógrafo
que guardo bajo el brazo
pero sustraigo de la boca
mi diminuta verdad
y la coloco en su mano huesuda
Salto al agua
hacia el bosque motorizado
embarrado de tinta el cuerpo
es ortografía táctil
que elude los intrincados
ramajes del lenguaje
escucho el canto de Pizarnik
haciéndose jaula
y el teclear de Carrera contra
la caja de textos
yacen miles de yoes muertos por
tierra
junto a otros mil androides
con máscaras de mí mismo
martillados por el teclado
lo mecánico y lo orgánico
se pelean por el signo
En medio de la floresta
maquinal
hay una llama
un espejo que llama
es el Hermes
el reflejo de otro espejo
autocontemplándose
el fractal hermafrodita
sicigia perfecta
Ánima + Ánimus
mirándome desde el encierro
Mi Yo
indestructible
—COMIENZA A CERRARSE EL POEMA—
cuando se sinceran
la PÁGINA BLANCA
y LA PÁGINA NEGRA
cuando mi sombra
se encuentra
Frente al nictógrafo
cuando intento conversar
a través de diminuta ventana
con el Invisible
tras el Cieloscuro
tras el Cieloscuro
José Raúl Ubieta
Yani Clarke
bad poetry
recuerdo la frase “bad painting” referida
a una cierta manera de pintar en los Setentas
irrespetuosa de los árbitros del arte
medio chapucera medio
chueca y atrevida
dotada de cierto humor
es decir
del humor de aquellos que parodian lo que admiran
me preguntaba
en uno de los poemas destinados
a la caja de zapatos
si sería posible un movimiento de
“bad poetry”
me preguntaba cuáles serían sus rasgos
o
más bien
sus desfiguraciones sus
manquedades sus tartamudeos sus rupturas sus reticencias
sus mediocres manifiestos ahítos de
gulemba rebeldía
de hecho
releí todos mis poemas con cierta
sobresaltada expectativa de encontrar
algún “bad poem” que replanteara
los cánones del verso
y nada encontré lo suficientemente malo
como para fundar un nuevo estilo
una tendría que acostumbrarse
a ser poeta del montón
agazapada en la cotidianidad del lenguaje
obsecadamente dedicada a pescar
alguna frase refulgente que hiciera del poema
simplemente otra cosa
pero no hay que ser tan ambiciosa
quizás el “bad poem” sea eso:
una ambición sin su poema
Lilliana Ramos Collado
bad poetry
A Anna Lidia Vega Serova
porque ella
me dijo
que ya había
escrito
un libro sobre esto
recuerdo la frase “bad painting” referida
a una cierta manera de pintar en los Setentas
irrespetuosa de los árbitros del arte
medio chapucera medio
chueca y atrevida
dotada de cierto humor
es decir
del humor de aquellos que parodian lo que admiran
me preguntaba
en uno de los poemas destinados
a la caja de zapatos
si sería posible un movimiento de
“bad poetry”
me preguntaba cuáles serían sus rasgos
o
más bien
sus desfiguraciones sus
manquedades sus tartamudeos sus rupturas sus reticencias
sus mediocres manifiestos ahítos de
gulemba rebeldía
de hecho
releí todos mis poemas con cierta
sobresaltada expectativa de encontrar
algún “bad poem” que replanteara
los cánones del verso
y nada encontré lo suficientemente malo
como para fundar un nuevo estilo
una tendría que acostumbrarse
a ser poeta del montón
agazapada en la cotidianidad del lenguaje
obsecadamente dedicada a pescar
alguna frase refulgente que hiciera del poema
simplemente otra cosa
pero no hay que ser tan ambiciosa
quizás el “bad poem” sea eso:
una ambición sin su poema
Lilliana Ramos Collado
Mrzyk & Moriceau
people are meanies in the end
cuando tuve mis primeros peces,
los sacaba del agua para ver si morían,
por lo que no tendría pajaritos
de nuevo,
pero sí una gallina
,no entiendo,
¿nunca jugaste secretito?
sí, al final la confidencia
podía ser cualquier cosa
menos lo dicho
pero aún no veo la relación,
la categoría es cosas que
mueren
y yo no tengo por qué estar
dispuesta a la muerte de cuanto
animalito
se pose sobre mi ventana,
con decir que no te gustan los
pájaros era suficiente
,no,
porque la categoría no es cosas
que vuelan, ni plumíferos,
la categoría es
,nosotros,
supongo que sí, ¿en tanto
animalitos?
en tanto estamos dispuestos
desde el origen,
¿y al final?,
a casi cualquier cosa,
a ver.
a ver.
Guillermo Rebollo-Gil
Katrin Coetzer
Los artistas
Los amigos de mamá
tienen tatuajes y trenzas.
Son tan raros que mamá
les hace comida celta
con habichuelas y rábanos
con zanahorias y acelgas,
y cuando ellos llegan juntos
pone música francesa,
también música africana,
y claro está, japonesa.
Todos bailan abrazados,
casi todos leen poemas
en voz tan alta que a veces
varios vecinos se quejan.
Mamá dice que no importa.
Mamá conversa y conversa.
Un dúo se llama Karma,
aquella, Dora Theresa,
y el de atrás no tiene nombre.
Toman té, vino y cerveza.
Son tan alegres que siempre
los extraño si se alejan.
Yo quiero ser como ellos
cuando crezca.
cuando crezca.
Legna Rodríguez Iglesias
Yani Clarke
sobre mi
lugar en la historia de la literatura puertorriqueña
de qué
será de mí
Lilliana Ramos Collado
Mrzyk & Moriceau
¿qué hora se asoma ahora que me asolo?
repaso la propaganda política
y me comprometo a comer mejor.
no tengo mayores expectativas:
apenas constaté mi coraza
rendí mi coartada.
ciudadana amada,
las últimas horas a solas
me arrojan adivinanzas
¿tus últimos tres dígitos son?
dejé un msj en cada
contestador.
Valderrama 17
Textos
Imágenes
Val Britton
Yani Clarke
Mrzyk & Moriceau
Los Valderramas agradecemos enormemente a Ediciones Aguadulces y en especial a Cindy Jiménez-Vera este número.
Abrazo enorme.
Yani Clarke
Mrzyk & Moriceau
Los Valderramas agradecemos enormemente a Ediciones Aguadulces y en especial a Cindy Jiménez-Vera este número.
Abrazo enorme.